La Floración

Entre febrero y marzo, los campos de Cieza despiertan del letargo invernal y producen un estallido de color incomparable para recibir a la primavera: melocotoneros, almendros, albaricoqueros y ciruelos en flor tiñen de rosa y fucsia más de 13.000 hectáreas, en lo que es un auténtico espectáculo para los sentidos.